La agencia EFE se ha hecho eco del proyecto «Commercium epistularum», promovido por Claudia Ibarzo, profesora de latín del IES Tierra Estella, y tres docentes de Almendralejo (Badajoz), Cáceres y Algezares (Murcia). Este proyecto se inició el curso pasado y participó alumnado de 4º ESO y 1º Bachillerato. Este año se ha sumado a la iniciativa más de un centenar de centros, algunos de ellos europeos. Aquí tenéis la noticia:
«Más de 2.000 alumnos de latín de secundaria y bachillerato de toda España participan en un pionero proyecto de intercambio de postales, cartas y pergaminos manuscritos en esta lengua, un modo de mantenerla viva, conocer a chicos de otros lugares e incluso hacer amigos en ‘instagramma’ (Instagram) y ‘pipiator’ (Twitter).
La experiencia, que se retoma tras un intento fallido en pandemia, en 2021, entre unos pocos institutos, quiere demostrar que el latín es una herramienta comunicativa como cualquier otro idioma moderno y que se puede usar en situaciones reales, explica a EFE la profesora Claudia Ibarzo.
Coinciden Claudia Ibarzo y Manuel Moreno que este modo de enseñar implica un aprendizaje mucho más significativo para sus alumnos; la materia les ‘engancha’ y motiva más; mejoran su nivel de latín y el contenido no se les olvida de un curso a otro.
‘Además, subraya Moreno, el latín es la llave para acceder a más de veinte siglos de historia, ya que hasta el siglo XVIII era la lengua común, como ahora el inglés; por tanto, el legado del latín es enorme como para olvidarlo, no se limita a Roma’.
Al final, es una cosa «tan sencilla como abrir a los alumnos al mundo, hacerles ver que el latín no es ‘la cuarta (clase) del jueves’, sino que hay gente en todo el mundo que aprende y disfruta» de esta lengua, añade Ibarzo.»
Enlace: “Cómo mantener vivo el latín en tiempos de Twitter e Instagram”, por Marina Segura Ramos.